Aunque dentro de la conferencia especial del Google I/O 2013, no se hizo un segmento dedicado exclusivamente a Google Glass, ningún expositor se quedó sin mencionar por lo menos alguna característica del proyecto.

De hecho ya son muchas las fotos, videos e impresiones que inundan la red gracias a los “exploradores” que hasta ahora pudieron recibir el dispositivo. Si alguna vez se encuentra a alguien en la calle gritando ¡Ok Glass take a picture! o moviendo la cabeza de forma extraña, sonría no hay por qué temer.

Le llegó reemplazo al smartphone

Cada vez tenemos más sensores trabajando en conjunto con Internet, accesorios deportivos, utensilios domésticos, y hasta plantas que podemos monitorear o controlar para nuestro propio beneficio gracias al “Internet of Things”.

Google Glass se presenta como la nueva alternativa, no solo de navegar por la web a través de gestos y comandos de voz, también de mantener una verdadera interacción entre el mundo real y el ambiente virtual (realidad aumentada).

Esta variable de la información digital en línea, busca albergarse en plataformas móviles que podamos manipular sin esfuerzo, aunque a Google Glass le falta trabajo para cumplir perfectamente con dicho papel, no hay duda que se adecúa con propiedad.

¿Cómo funciona?

Lo que en su momento fue conocido como Project Glass, un prototipo diseñado por la gente de Google[x], se presentó al mundo en el Google I/O 2012, donde pudo ser reservado exclusivamente por los desarrolladores que asistieron al evento y asumieron su costo (1500 dólares), a cambio recibieron un bloque de cristal numerado como comprobante.

Glass proyecta la imagen a una micro pantalla de alta definición, allí la información está organizada en forma de “timeline” por el que navegas a través de diferentes tarjetas utilizando un “touchpad”.

Estos “items” se alimentan de servicios web (Glassware), comunicados por medio de la API Google Mirror.

Dicho intercambio de datos se realiza en línea y no requiere la ejecución de código en el dispositivo. Para que este proceso funcione, Glass necesita una conexión a Internet que puede ser vía Wifi, Bluetooth o “tethering” con un smartphone.

El equipo tiene una cámara de 5 megapíxeles para tomar fotografías y video a una resolución de 720p, la capacidad de almacenamiento es de 16GB (12GB para el usuario) que pueden sincronizarse con la nube de Google.

Un aspecto interesante es la recepción del sonido, Google Glass transmite vibraciones que son conducidas por los huesos del cráneo hasta el oído medio.

Experimentar la web a través de los sentidos

Además de las aplicaciones del New York Times y Path, se unieron a la plataforma Twitter, Facebook, Evernote, Tumblr, Elle y CNN. Por ahora el proyecto continúa en desarrollo e incluso las listas para adquirir el prototipo están cerradas.

Nuestro fundador @cvander es uno de los afortunados que tiene acceso a Google Glass y se encuentra probando a fondo su tecnología, habrá que estar pendiente de sus impresiones.

A continuación les compartimos el “unboxing”, disfruten: