El punto neural fue resolver la gran incógnita, ¿existe la Web 2.0 en México?, lamentablemente los ponentes concluyeron que no, aunque suena algo doloroso para nuestro país, es cierto, ya que actualmente sólo hay pocos brotes de proyectos que intentan trascender a una nueva Web.

Armando, se encargó de aclarar que no todo lo que tenga un logo con reflejo o un video de YouTube, pertenece a la WEB 2.0. Sin embargo, mencionó ejemplo de proyectos exitosos en Latinoamérica, proyectos iniciados por jóvenes con buenas ideas. Un ejemplo mexicano es el sitio PodErato, proyecto que poco crece y se fortalece.

Al final las preguntas de los asistentes dieron para discutir más temas, muchos están interesados sobre los asuntos legales y fiscales que vendrán acompañando a la nueva fase del Internet y sus contenidos.

Existe poco conocimiento de los parámetros que marcan las tendencias del nuevo camino de la Web 2.0 y sus estándares, pero son los entusiastas, los que alimentan de nuevas ideas el contenido que se puede encontrar actualmente en Internet. Lo que presenciamos, es sólo una probadita de todo lo que podremos aprender en el evento Cancún, México Web 2.0.