PW Marketing es la primera empresa castigada fuertemente por envío masivo de correo no solicitado y otras prácticas de spamming.

Los fiscales se basaron en una ley sancionada en 1998 que regula esta dañina práctica y que menciona que cualquier individuo puede demandar a empresas que envien spam hasta por un valor de mil dólares por mensaje enviado que no tenga permiso de recepción de parte del destinatario.

Esperamos que la reacción reduzca el correo basura del que todos somos víctimas luego de este primer fuerte golpe contra el spam.