Cuando de hacer una demostración se trata, es bueno que sigamos algunos parámetros. Primero, debes estar consciente de quién es tu público y luego, no olvidar un par de consejos para impactar a cada uno de los miembros de tu audiencia.

Divide tu público en cuatro secciones

TC50- Público
En primer lugar, los analistas. Debes estar preparado para recibir oleadas de visitantes de todo tipo de sitios web. Ellos te darán un gran influjo de atención y con alguna que otra reseña sobre tu producto, dirigirán el tráfico hacia donde tú quieres. Si la calidad es alta, estos visitantes regresarán. Aprovecha el repentino incremento en las visitas y reúne todo tipo de información, registra el comportamiento de tus visitantes y solicítales retroalimentación.

El segundo grupo es la cobertura mediática. Las reseñas que hacen los medios probablemente sea un arma de doble filo porque pueden atraer atención sobre ti, como ya mencioné, pero en eventos como estos, la preocupación mayor suele ser darle cobertura a la mayor cantidad de cosas que se pueda. La calidad de la crítica queda en segundo plano a veces, aunque no intencionalmente según Josh Catone, quien ha cubierto eventos como el TechCrunch y el DEMO.

Tercero, encontramos a los inversionistas: De nuevo, lo más importante es hacer una buena demostración y demostrar el potencial de tu start-up, que es el argumento más convincente del que puedes hacer uso para obtener un poco de plata para seguir trabajando en él.

Allí tenemos el ejemplo de Yammer, el ganador del TC 2008, que obtuvo el premio gracias a la falta de modelos de negocios frente al frenesí alrededor de Twitter. Yammer supo ofrecer un modelo de negocios bastante elaborado y combinando una buena presentación que dirigió la atención hacia su servicio, la promesa del retorno de la inversión y la continuidad en la calidad de su producto, logro posicionarse bastante bien.

El cuarto grupo es el que más nos interesa: el de los emprendedores. Jason Calacanis, miembro del jurado del TC50, les presenta una serie de consejos para que puedan hacer el mejor uso de sus 15 minutos de fama (aunque como ya verán, en realidad deben ser menos de 15).

Los consejos de Calacanis

Hay apenas una delgada línea entre una excelente presentación y una horrible presentación. Y para asegurarnos de que estemos siempre en la primera categoría, Jason nos propone un par de consejos básicos que debemos seguir (18 en total), entre los que destacan:

  • Enseña tu producto en los primeros 60 segundos. No presentes toneladas de información, mantente dentro de lo que realmente importa: ¿qué haces y por qué lo haces mejor que los demás?
  • Tomate la menor cantidad de tiempo posible: deja a tu público con ganas de más, en vez de aburrirlos hasta el cansancio con estadísticas y datos.
  • Habla de lo que has hecho, no de lo que planeas hacer: si no tienes un producto que enseñar, no tomes el riesgo de quedar en mal. Asegúrate de comprender a tu competencia y distínguete de ella.
  • PowerPoint es la muerte. Ya no es 1995 y el PowerPoint no te ayudará a dejar una buena impresión.
  • Al momento de las preguntas, responde con brevedad y no pretendas saber la respuesta cuando no es así.
  • Cuando hay problemas técnicos, tienes que seguir con tu presentación porque el tiempo es valioso. Es bueno que tengas un par de anécdotas ya preparadas, para mantener la atención en ti y no en una pantalla en blanco o tu asistente luchando porque funcione.

Entre otras varias recomendaciones, Calacanis nos sugiere formas de cómo arruinar nuestra presentación.

Proyectos exitosos de emprendedores exitosos como Santiago Siri, que participó por segunda vez en el TC50 2009 con The Whuffie Bank, de seguro no presentó su anterior proyecto (Popego) hablando de sus logros previos, o del tamaño del mercado; ni siquiera hablando en términos generales del panorama competitivo al que se enfrenta.

Hay otras recomendaciones de orden comunicativo como cambiar los tonos de voz y tomar en cuenta la puntualidad, pero no hay que olvidar que lo más importante es el contenido de nuestro producto y que las demostraciones son sólo la forma para darlo a conocer.